Con la Nieve hasta los huesos
Cuando empezó esta travesía fue en un momento de mi vida en el cual estaba atravesando por un gran nivel emocional, trabajando a diario por entrenar futuros futbolistas, planeando estrategias para mejorar la calidad de vida de los niños de mi pueblo Macanal, en Boyacá Colombia; y pensaba que ¿podría ser mejor si lo que tengo ya me hace feliz?. De la nada mi historia de vida da una vuelta gigante y se convierte ahora en un camino nuevo y de trayectos por descubrir.
En ese momento de paz y confort de mi vida aparece YOUNIC, un proyecto de alcance Europeo, con intenciones de carácter mundial; ante esta nueva oportunidad en mi vida no dude en probar mi conocimiento, mi experiencia, todo lo que he ido edificando en conjunto a mis socios y familiares más cercanos y leales, decidí tomar rumbo a Rumanía sin duda por ellos y por mí.
En febrero y marzo de 2018 presencié cosas que solamente en la pantalla chica y la pantalla grande había visto y que mi niño interior deseaba conocer, tuvieron que pasar 27 años de mi vida para darme cuenta de la idea tan diferente que tenía yo de Europa, o por lo menos de lo que gira en torno a el viejo continente. Al llegar a Rumania junto con mi compañero y nuevo amigo el “Manzar” quedamos en estado de shock al sentir el frio, vivir la noche de una solitaria Bucharest de camino al hotel a la 1 de la mañana. Yo pensaba, (no puedo creer, mi primera noche en otro país) eso jamás se me habría ocurrido antes; al día siguiente después de conocer los Leí o Ron (moneda Rumana) entendimos que el taxi y el hotel nos había salido a mal precio, pero no pasa nada, estamos aprendiendo “pensamos” mientras nos alistábamos para tomar un tren de 11 horas hasta la inimaginable Arad, un tren que pasaba por montañas cubiertas de nieve y pinos que parecían refugiarse en su follaje para aguantar las inclemencias del invierno, conocimos gente en el camino y no dejaba de estar fascinado con subir a un tren por primera vez en mi vida. Después de cruzar túneles, montaña, llanos, ríos y puentes, atravesar un sin número de ciudades, llegamos al destino, Arad que nos deba otro abrazo frio, ya que la temperatura oscilaba entre los 0 y los 5 grados centígrados. Descubrí que la vida me estaba regalando una de las mejores experiencias, no nevaba por esos días, pero después de una semana, wow! El día más grande de este invierno, llovía nieve a montones y como en ese entonces ya había hecho amigos de México, Portugal, España y Turquía, hubo momentos para compartir y disfrutar con la nieve, jugábamos como niños, después nos quejábamos del frio, pero todo era una locura; no podía creer que estaba en Arad Rumania, caminando sobre el hielo y subiendo en tram vía para llegar al nuevo trabajo, para prestar mis conocimientos al voluntariado Europeo y ellos para expandírmelos y transformarlos.
La internacional Romania
Marzo ha sido uno de los mejores meses porque el invierno cesó y los amigos llegaron. Este mes comparado con el anterior no solo era más cálido hablando del clima, sino también podíamos conocer más y más jóvenes de otros países debido a las actividades que por culpa de la nieve no se podían hacer, ahora con espacios a donde ir y compartir pudimos cumplir uno de los objetivos pensando en mejorar el idioma Ingles; bueno aunque recibimos clases una vez a la semana no era suficiente, además el idioma Rumano no es tan fácil como parece, pues más de una persona nos dice, si ustedes hablan español como no aprenden más rápido el rumano; bueno es una lengua nueva y unos tres países la usan entonces no es muy llamativa de aprender, sin embargo 2 clases a la semana hacen más la diferencia que el inglés, ahora está todo mejor, hablando a media el inglés a medias el rumano pudimos compartir en pubs, restaurantes, lugares turísticos, parques, entre otros donde hice grandes amigos de Italia, Moldavia, Francia, Portugal y España, si España, aleluya! Podía hablar con 3 Españoles y además que los portugueses también dominaban el idioma español y algunas cosas se hicieron más fáciles. Esto de hablar en español con ellos era un 30% bueno y un 70% malo, según yo por supuesto, cuando vi esto de hablar español acá, y pensar me voy a atrasar con lo aprendido en inglés, dije Stop! Me puse las pilas como decimos en Colombia y me atreví a hablar con ellos en inglés para que todos mejoráramos el idioma y así nos pudiéramos desenvolver más fácil en toda Rumania.
La segunda parte de este mes es un poco más emocionante, porque mis compañeros Manuel, Francisco y José partíamos Rumbo a Bucarest, una ciudad fría pero con mucho movimiento, pues se trataba de la capital de Rumanía, más gente, mas tráfico, mas lugares por conocer. Nos quedamos por una semana en un Hotel increíble, compartimos entrenamiento con personas de más de 15 países de Europa, y ellos compartieron con México y Colombia, era un intercambio interesante de ideas, de culturas, un momento de nuestras vidas muy enriquecedor, se hablaba de política, deporte, comida, este era un abrir de ojos gigante para todos, de conocer el mundo por medio de las vivencias del otro, un mundo con aspiraciones de cambio, de ser visto con ojos de juventud y nosotros teníamos un momento de locura!. Vivimos agradables momentos después que el hielo que quedaba se evaporaba por la primavera que llegaba, conocimos la ciudad, intercambiamos ideas para mejorar en nuestros proyectos he hicimos algo más grande, prometimos no olvidarnos para en un futuro volver a vernos mucho más fuertes y como grandes líderes.
Bienvenida Pascua
Con el mes de Abril viene un montón de comida debido a las celebraciones que iba a tener la ciudad con el festival de comida, la pascua, festival de la cerveza entre otros más festivales tradicionales, conciertos y deporte. Un mes muy movido en el que la labor con los jóvenes del centro juvenil y los de la primaria corcoveo, son más asertivos por que nos sentíamos ya más habituados, además comenzamos a trabajar más fuerte con el tema de la organización del evento deportivo dentro del marco del Festival del Tomate en Macea cerca de la ciudad de Arad. Las clases de inglés pararon he iniciamos con la construcción del plan de acción para promocionar el evento que se realizaría en el mes de Julio del 2018, trabajamos en diseño y promoción online y offline para reclutar voluntarios locales en los colegios de la localidad, con un gran inicio realizamos reuniones, conferencias y muestras de nuestros países para motivarlos a participar con nosotros. El mes cada vez era más pesado que los anteriores, pero se vivían momentos de gran crecimiento en el conocimiento sobre eventos deportivos y la retroalimentación de otros conocimientos casi que olvidados.
Dentro de lo poco que conocimos ese mes pudimos visitar fortalezas medievales cerca de la ciudad, cascadas y ríos, todo gracias a las amistades que hicimos, las cuales tenían carro para transportarnos. Las aventuras en el campo conociendo estos antiguos lugares hacen volar la imaginación y querer explorar cada rincón, relajarse y contemplar sus muros, crear historias de guerras y caballeros. En la pascua tuvimos la fortuna de compartir más y más comida, chocolates y dulces, las reuniones y los ratos compartidos se convertían en el pan de cada día, podíamos ver que el ambiente era más divertido y el clima se elevaba un poco más con forme pasaban los días.
Al final del mes todo lo aprendido durante los tres o casi 4 primeros meses rindió frutos, pues ya podíamos tener nuestro objetivo claro sobre el trabajo de voluntariado que veníamos haciendo y sacar nuestras propias conclusiones de que aportamos y que no para mejorar los siguientes dos meses, donde tendríamos el evento por el cual prestamos este voluntariado.
Entre la Paella y Drácula
Como todo nuevo mes, pues nos llenamos de energía y positivismo para cumplir con los objetivos, en este junio con mundial, viajes, cosas nuevas por vivir, pude aceptar que en mi forma de ser habían cambios muy notorios, como pensaba antes y ahora, el lenguaje, mi cuerpo y mis actitudes.
A partir de notar y ver la necesidad de tomar mis días libres entendí que no era solo mi cuerpo sino mi espíritu que pedía a gritos un break, así que decidí tomar unos días que ofrece el voluntariado y viajar a España, conocer mi familia (bueno parte de mi familia que nunca había visto en la vida) fue un momento único y esto gracias a la oportunidad del EVS, poder vivir en carne propia un abrazo de mi abuelo por primera vez en la vida, es de mis momentos más enormes y gratificantes; pase unos días en Valencia, Barcelona y Bilbao, conociendo, comiendo, y compartiendo con mi familia y mis dos amigos Voluntarios de Colombia Lizeth y Ferney, además conocí a un gran mentor llamado Txus Torres a quien admiro ahora por ese esfuerzo y calidad humana que les ofrece a mis compañeros, me sentí como si nuestra mentora Ramona Seles tuviera un doble masculino en España, pues ambos son geniales.
Aprendí mucho en el viaje y pude reflexionar bastante sobre mi objetivo en la vida, me preparaba mentalmente para retornar a las actividades en Romania pero ansioso porque se aproximaba algo muy importante por conocer acá y era Brasov y el castillo de Bran o de Drácula.
Después de volver a casa en Arad, mis compañeros Latinos y yo nos fuimos en tren por 9 horas con destino Brasov, allí tendríamos el Mid term o entrenamiento medio, que nos hacía reunir con varios de los amigos que hicimos en el primer entrenamiento con el objetivo de compartir las experiencias y construir nuevas ideas para el futuro en términos de voluntariado mundial.
Caminamos las hermosas calles de brasov, ciudad con naturaleza abundante, comida deliciosa, y espacios medievales como de una película; estábamos disfrutando y decidimos que al terminal el entrenamiento iríamos a conocer el Castillo de Drácula, lo cual fue inolvidable, hum, surgieron dudas al llegar al lugar y ver que no es tan gigantesco, sin embargo sí muy lindo, pudimos conocer dentro y fuera de la estructura, mitos y leyendas de vampiros y de muertes trágicas de la edad media. Todo el recorrido anteriormente mencionado valió mucho la pena, es difícil olvidar y además es probable que jamás uno nunca regrese, así que se puede decir que fue un suelo cumplido.
